viernes, 4 de octubre de 2013

Cañal en Flor

Alfredo Espino
Jicaras Tristes

Eran mares lo cañales
que yo contemplaba un día
mi barca de fantasía
bogaba sobre esos mares.

El cañal no se enguirnalda
como los mares, de espumas,
sus flores mas bien son plumas
sobre espadas de esmeralda...

Los vientos  -niños perversos-
bajan desde las montañas,
y se oyen entre las cañas
como deshojando versos...

Mientras el hombre es infiel,
tan buenos son los cañales,
porque teniendo puñales,
se dejan robar la miel!...

Y que triste la molienda
aunque vuele por la hacienda
de la alegría el tropel,
porque destrozan entrañas
los trapiches, y las cañas...
¡Vierten lagrimas de miel!



3 comentarios: